La senda de la gobernanza de la IA en la ASEAN: desigual pero avanzando
La Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) y sus estados miembros han adoptado un enfoque amigable hacia la innovación en inteligencia artificial (IA), lo que ha permitido avanzar hacia el objetivo de convertirse en una economía digital completamente desarrollada. Sin embargo, los crecientes riesgos asociados a la IA sugieren la necesidad de establecer regulaciones más vinculantes.
Se podría considerar oportuno revisar las pautas existentes y evaluar qué países están tecnológicamente preparados para implementar regulaciones exigibles. Singapur tiene el potencial de convertirse en un referente en gobernanza, facilitando un enfoque regional a través de la alineación de regulaciones en toda la ASEAN. Esto podría mejorar la credibilidad de la región como un hub tecnológico, proteger a los individuos de actores malintencionados y atraer inversión global al reforzar la imagen de la ASEAN como un destino confiable para el desarrollo de IA.
Regulación de la IA: El enfoque de la ASEAN
El auge de la IA en los últimos años se ha alineado con la ambición de la ASEAN de convertirse en una economía digital y sociedad digital para 2025. Sin embargo, su documento clave, el Plan Maestro Digital de la ASEAN 2025, no menciona la IA en sus 140 páginas, lo que sugiere que su potencial no fue completamente anticipado durante el proceso de redacción.
Para ponerse al día, la ASEAN ha adoptado un enfoque de gobernanza amigable con la innovación. En febrero de 2024, se lanzó la Guía sobre Gobernanza y Ética de la IA, que establece principios fundamentales como transparencia, equidad, seguridad, confiabilidad, privacidad, responsabilidad y humanidad. Este marco adaptable permite a los países ajustar la gobernanza a sus contextos específicos y grados de preparación para la IA.
Desarrollo de Playbooks de IA a nivel nacional
Hasta la fecha, ningún estado miembro ha promulgado legislación vinculante dedicada a la IA. Los países del Sudeste Asiático se basan principalmente en instrumentos de soft law, como directrices éticas y marcos de gobernanza.
Brunéi está desarrollando un marco de gobernanza basado en principios de innovación, publicado en su propia Guía sobre Gobernanza y Ética de la IA. Además, se está finalizando la Ley de Protección de Datos Personales, un paso crítico para regular las prácticas de datos en sistemas de IA.
Vietnam promueve la IA a través del Programa Nacional de Transformación Digital, integrando la IA en la educación y la planificación urbana. La gobernanza de IA en Malasia combina principios éticos con marcos legales, promoviendo su uso responsable en sectores de alto impacto como la salud y los servicios públicos.
Tailandia cuenta con un Plan Nacional de IA que busca posicionar al país como un hub regional de IA, mientras que Indonesia se basa en leyes existentes adaptadas a la IA, enfocándose en la protección del consumidor. En Filipinas, se han introducido regulaciones específicas para guiar el crecimiento responsable de las tecnologías de IA.
El caso curioso de Singapur
Singapur es reconocido como la ciudad más inteligente de Asia debido a su liderazgo en innovación. Su enfoque hacia la gobernanza de IA, aunque flexible y basado en principios, podría ser una oportunidad perdida para establecer regulaciones vinculantes en la región. La implementación efectiva de su Ley de Ciberseguridad demuestra su capacidad regulatoria.
Si bien Singapur avanza hacia un modelo de gobernanza proactivo y flexible, otros estados de la ASEAN están dando pasos significativos hacia políticas de IA. Estos esfuerzos forman un enfoque regional que prioriza la preparación sobre la coerción. Sin embargo, una vez que se logre una capacidad básica de gobernanza, el siguiente paso lógico será avanzar hacia regulaciones más formales y vinculantes.
Conclusión
La gobernanza de la IA en el Sudeste Asiático, aunque desigual, refleja un intento de adaptar la regulación a diversas realidades políticas y económicas. El uso de soft law por parte de la ASEAN muestra un enfoque pragmático que promueve un modelo inclusivo que permite a los países participar en el desarrollo de IA. A medida que la región avanza, se deberán dar pasos más audaces hacia la regulación vinculante para abordar los riesgos asociados con la rápida evolución de la tecnología de IA.