Cómo la IA está transformando la gobernanza y el cumplimiento en 2025
La gobernanza, el riesgo y el cumplimiento (GRC) han pasado de ser operaciones de oficina secundaria a una prioridad urgente en las salas de juntas de las empresas del Reino Unido.
Con la Deber del Consumidor de la Autoridad de Conducta Financiera del Reino Unido (FCA) en pleno efecto, el Régimen de Gerentes Senior y Certificación (SMCR) reforzando la responsabilidad, y los requisitos de resiliencia operativa que entrarán en vigor en marzo de 2025, los equipos de GRC enfrentan una presión creciente.
IntellectAI, que ofrece una variedad de soluciones impulsadas por IA, ha explorado cómo la IA está redefiniendo el GRC para las empresas modernas.
Un nuevo enfoque hacia la gobernanza y el cumplimiento
Las empresas ahora enfrentan un escrutinio elevado y deben demostrar no solo que cumplen con las regulaciones, sino también que el cumplimiento es proactivo, transparente y centrado en la protección del consumidor. Cada vez más, el GRC se está convirtiendo menos en una defensa y más en un habilitador de resiliencia, agilidad y crecimiento sostenible.
Durante años, el GRC fue considerado una carga de costos, centrada en registros fragmentados y procesos de auditoría lentos. Sin embargo, el entorno regulatorio actual exige un enfoque diferente. Los ejecutivos buscan innovaciones que no comprometan la resiliencia. Los reguladores son igualmente claros: los resultados son lo que importa. Las juntas deben poder mostrar que los riesgos se identifican, evalúan y mitigan en tiempo real, especialmente en lo que respecta a los consumidores vulnerables. Este cambio ha redefinido el GRC como un motor de previsión, transformando el cumplimiento de una lista de verificación estática en una ventaja competitiva.
Los riesgos de no cumplir con los estándares regulatorios
Los riesgos de no cumplir con los estándares regulatorios son evidentes. Los bancos y las instituciones financieras del Reino Unido han pagado sanciones significativas en los últimos años por deficiencias en áreas que van desde la prevención del lavado de dinero (AML) hasta la protección del consumidor.
La IA agente como fuerza transformadora
La IA agente está emergiendo como una fuerza transformadora en este contexto. A diferencia de la automatización tradicional, estos sistemas inteligentes pueden percibir, razonar y actuar de manera independiente a través de los flujos de trabajo. Integran datos de sistemas dispares, clasifican riesgos y producen trazas de evidencia sin esfuerzo manual continuo.
Para las empresas del Reino Unido, el atractivo radica en tres cualidades clave: explicabilidad integrada que se alinea con el requisito de «pasos razonables» del SMCR, monitoreo continuo que proporciona supervisión casi en tiempo real, y la capacidad de identificar riesgos para consumidores vulnerables, apoyando directamente los resultados del Deber del Consumidor.
Ejemplos de éxito con Purple Fabric
La plataforma Purple Fabric de IntellectAI es uno de los principales actores que llevan esta visión a la práctica. Comercializada como un sistema de IA agente de grado empresarial, Purple Fabric integra expertos digitales multiagentes directamente en los procesos comerciales.
Un gestor de patrimonio que lidiaba con más de 10,000 casos de quejas redujo los tiempos de investigación de semanas a minutos con Purple Fabric, restaurando la confianza del regulador y mejorando el cumplimiento de los acuerdos de nivel de servicio (SLA). En otro ejemplo, las empresas utilizaron sus agentes para automatizar el mapeo de cumplimiento, reduciendo los tiempos de revisión manual en un 70% y mejorando la preparación para auditorías en un 60%. Su capacidad Client 360 apoya además el Deber del Consumidor al analizar datos estructurados y no estructurados para señalar riesgos, ayudando a las empresas a mejorar la confianza y retención del cliente.
Conclusión
El atractivo de Purple Fabric en el Reino Unido proviene de su alineación con las prioridades de la FCA, su diseño escalable y su enfoque en resultados medibles. Al ayudar a las empresas a reducir costos en hasta un 60%, aumentar la productividad hasta diez veces y resolver quejas de manera más eficiente, está posicionando el GRC no como una función reactiva, sino como un habilitador del crecimiento.