La regulación de la inteligencia artificial (IA) en California
Más de un año después de que la legislación europea que regula la inteligencia artificial entrara en vigor, el estado de California, cuna de esta tecnología, ha promulgado una ley similar. Mientras la administración de Trump se opone a cualquier restricción en la carrera de la IA, los impulsores de la ley conocida como “SB 53” han buscado encontrar el equilibrio adecuado para no sofocar la innovación, pero evitando sus excesos.
California detiene el desarrollo incontrolado de la IA
Como cuna de la inteligencia artificial, con las sedes de líderes tecnológicos como Google, Meta, OpenAI (ChatGPT) y Anthropic (fundada por desertores de la anterior), California está bien posicionada para comprender los riesgos asociados con esta tecnología.
El pasado lunes, el estado demócrata aprobó una ley, conocida como “SB 53”, destinada a regular el uso de la inteligencia artificial.
Precedida por la Ley de IA Europea
Presentada como sin precedentes a nivel global, esta nueva legislación fue, sin embargo, precedida por una legislación europea similar, la “AI Act”. Esta última fue descrita en su momento como pionera y entró en vigor el 1 de agosto de 2024, con implementación gradual a partir del 2 de febrero de 2025.
La nueva ley californiana sigue dos intentos recientes al otro lado del Atlántico, ambos fallidos. Por un lado, la administración republicana de Trump intentó bloquear cualquier regulación de la IA por parte de los estados de EE. UU., argumentando que dicha regulación perjudicaría a los Estados Unidos en la carrera de la IA contra China, que no tiene tales reservas.
El riesgo de sofocar la innovación no es solo una preocupación para los republicanos. Este argumento también fue utilizado el año pasado por el gobernador demócrata de California, Gavin Newsom, para vetar a última hora un proyecto de ley propuesto por el senador local Scott Wiener, que también pertenece a su partido. Este proyecto de ley fue un intento inicial de regular la IA, pero se consideró demasiado estricto.
La aprobación de la ley “SB 53” en California marca un hito en el esfuerzo por establecer un marco regulatorio equilibrado que permita el desarrollo responsable de la inteligencia artificial, protegiendo así tanto la innovación como la seguridad pública.