La regulación de la inteligencia artificial en la Unión Europea
La Unión Europea ha tomado una importante medida al codificar nuevas regulaciones sobre el uso de la inteligencia artificial (IA) en el entorno laboral. A partir del 2 de agosto de 2026, los empleadores estarán prohibidos de utilizar IA para rastrear las emociones de los trabajadores mediante sistemas de cámaras web o reconocimiento de voz.
Objetivos de la nueva normativa
Las regulaciones forman parte de la Ley de Inteligencia Artificial, que tiene como objetivo principal prevenir que las empresas utilicen la IA para discriminar a empleados actuales y potenciales. Esta ley prohíbe el uso de IA para evaluar a los candidatos laborales en base a características personales no relacionadas, como el estatus socioeconómico, o para predecir la probabilidad de que un empleado cometa faltas.
Consecuencias para los empleadores
Los empleadores que no cumplan con las nuevas regulaciones podrían enfrentar multas de hasta el 7% de sus ingresos globales. Por lo tanto, se recomienda a las empresas que operan en la UE que evalúen sus sistemas actuales de IA y realicen los cambios necesarios para asegurar el cumplimiento de la ley. Además, se sugiere implementar capacitación a nivel empresarial para que todos comprendan las nuevas normativas.
Contexto global
A pesar de que muchos países han sido lentos en adoptar regulaciones sobre IA, el Reino Unido ha redactado legislación que restringe cómo los empleadores pueden utilizar esta tecnología. En comparación, los Estados Unidos han adoptado un enfoque más fragmentado, con algunos estados como Illinois, Colorado y la ciudad de Nueva York implementando leyes para aumentar la transparencia y reducir el sesgo.
Reflexiones finales
La confianza de los empleados puede verse afectada por el uso inapropiado de la tecnología. Como se menciona, «la confianza se pierde en cubos y se recupera en gotas», lo que implica que los errores iniciales en la aplicación de la IA tendrán implicaciones duraderas para la confianza de los empleados a lo largo del tiempo.
En conclusión, la regulación de la IA en el entorno laboral es un paso significativo hacia la protección de los derechos de los trabajadores y la creación de un ambiente laboral más ético y justo.