Retiro de la Directiva de Responsabilidad de IA por parte de la Comisión Europea
La Comisión Europea ha decidido no renovar el debate sobre la legislación propuesta para manejar los daños causados por la inteligencia artificial, citando una falta de acuerdo en la industria tecnológica, que ha abogado por regulaciones más simples.
Contexto de la Directiva de Responsabilidad de IA
La Directiva de Responsabilidad de IA fue concebida por primera vez en 2022, antes de la finalización del AI Act del bloque. El objetivo de la propuesta era mejorar el funcionamiento del mercado interno al establecer reglas uniformes sobre aspectos de responsabilidad civil no contractual por daños causados por sistemas de IA.
Decisión de Abandonar la Propuesta
La decisión de abandonar la propuesta fue reflejada en el programa de trabajo de la Comisión para 2025, que fue adoptado el 11 de febrero y presentado al Parlamento Europeo el 12 de febrero.
La Comisión explicó que no hay un acuerdo previsible y evaluará si se debe presentar otra propuesta o elegir un enfoque diferente en el futuro.
Reacciones a la Decisión
La decisión fue criticada por el Miembro del Parlamento Europeo alemán, Axel Voss, quien afirmó que la idea de que la directiva habría creado una regulación innecesaria, dado que ya existe el AI Act, no comprendía su propósito. La directiva estaba destinada a ser un mecanismo de responsabilidad ex post, que solo entraría en vigor una vez que ocurran daños, a diferencia del objetivo preventivo del AI Act.
Voss mencionó: “¿Por qué este giro repentino? La respuesta probablemente radica en la presión de los lobbistas de la industria que ven cualquier regla de responsabilidad como una amenaza existencial para sus modelos de negocio.”
Implicaciones para la Responsabilidad de IA
Peter Craddock, socio de Keller and Heckman, comentó que renunciar al debate sobre la directiva es más aceptable que tener que retirar la legislación después de su aprobación. Sin embargo, llamó la atención sobre cómo la Comisión abordará el objetivo de la directiva de avanzar hacia reglas de responsabilidad armonizadas en lugar de navegar por leyes individuales para cada estado miembro.
Craddock señaló: “¿Significa esto que no hay recurso para, por ejemplo, víctimas de discriminación basadas en el uso de un sistema de IA? Por supuesto que no, pero es importante mirar el régimen nacional.”
Perspectivas Futuras
El movimiento de la Comisión sugiere un posible cambio en el enfoque para abordar las críticas sobre el régimen regulatorio digital del bloque, que se ha vuelto complicado y pesado.
Un comunicado de prensa de la Comisión delineó el programa de trabajo como un marco más simple para reducir las cargas administrativas, reflejando la necesidad de más oportunidades, innovación y crecimiento para los ciudadanos y empresas, fomentando así una UE más segura y próspera.
La presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, se comprometió a “facilitar” el crecimiento del mercado de IA durante sus recientes declaraciones en la Cumbre de Acción de IA de Francia.
Conclusiones
La decisión de no avanzar con la Directiva de Responsabilidad de IA ha generado un debate significativo sobre el equilibrio entre la regulación y la innovación en el ámbito de la inteligencia artificial. Mientras que algunos ven esta acción como un alivio, otros advierten sobre las posibles consecuencias de la falta de regulación adecuada en un campo tan crítico y en rápida evolución.